Arroz Frito con brócoli
Existen multitud de técnicas para cocer arroz, y oiréis o leeréis a menudo a partidarios de unas u otras decir que la propia es la única que funciona. Que si no pones el agua hirviendo sale un engrudo, o que hay que cocerlo tapado (o destapado), que la proporción de arroz y agua es de 1 / 2 o Hasta 1 / 7!
Lo cierto es que todas funcionan bien, siempre y cuando os atengáis a un solo método (a la vez se entiende) y sepáis que no todos los arroces convienen para todas las cocciones, por ejemplo, no se puede hacer un risotto con arroz basmati (bueno nada es imposible pero no es lo mismo en absoluto).
A mí me encanta el arroz de todas las maneras posibles, y últimamente me ha dado por el arroz frito, que queda estupendo con arroz integral.
Para hacer un arroz frito se hace un arroz blanco, sin aceite ni nada y luego se rehoga con los ingredientes que elijamos (lo de las tres delicias no es obligatorio). Al no cocer los ingredientes con el arroz les podemos dar el punto de cocción que más nos guste, además se puede cocer el arroz con antelación si vamos a tener poco tiempo para preparar la comida.
Para este tipo de arroces yo cuezo el arroz a la japonesa (con agua fría y olla tapada, como os cuento en la receta) pero podéis hacer un arroz blanco como mejor se os de u os apetezca y seguir a partir de ahí.
Tiempo de preparación: 30 min + 1 h de remojo (se puede quedar más tiempo en remojo si os resulta más cómodo ponerlo por la mañana por ejemplo)
Raciones: 4
Ingredientes:
350 g de arroz integral o semi integral (una taza de café por persona).
Una medida de agua por cada medida de arroz. En el caso de mis tacitas de café, cuatro tacitas.*
Un brócoli.
Dos cebolletas.
5 dientes de ajo (los de la foto siguen siendo los de mi huerto, muy ricos pero minúsculos por eso hay un montón).
Una guindilla roja fresca.
50 ml de aceite de oliva.
Sal y pimienta.
Preparación:
Primero vamos a cocer el arroz:
Si habéis pesado el arroz medidlo en tazas o vasitos para calcular el agua necesaria para la cocción.
Lavar el arroz en un bol (o en la cazuela donde lo vais a cocer) con abundante agua para eliminar el almidón de la superficie de los granos llenándolo varias veces hasta que el agua salga transparente. Escurrirlo bien.
Colocar el arroz en una cazuela no demasiado ancha con tapa y añadir el agua fría necesaria para la cocción, mis cuatro tacitas de café.
Dejar en remojo durante una hora. Si pasada la hora de remojo se os ha enturbiado mucho el agua, es que no lo lavasteis lo suficiente, pero se puede arreglar. Fijaos en la altura del agua en la cazuela, tirad esa agua y poned agua fría limpia hasta la misma altura. No volváis a medir la misma cantidad de agua, porque los granos de arroz ya han absorbido una parte y estaréis añadiendo agua de más, con lo que os quedara el arroz pasado.
Poner la cazuela tapada a fuego medio hasta que hierva el agua.
Una vez alcanzado el hervor bajar el fuego al mínimo y dejar cocer durante unos 10 a 12 minutos hasta que ya no quede agua. Si cocéis arroz a menudo al final no hará falta ni que levantéis la tapa para ver cuando pasa, el sonido que hace al hervir cambia, pero eso ya es “pa nota”.
apagad el fuego cuando esta asi.
Apagar el fuego (y retirar la cazuela si cocináis en placa) y dejar reposar tapado otros 10 minutos.
Mientras se cuece el arroz vamos a preparar el resto.
Pelar y picar los ajos en trozos muy pequeños (quitad el germen si os resulta indigesto).
Lavar el brócoli, separar los ramitos, pelar el tallo y cortarlo en rodajas.
Lavar y picar la guindilla.
Poner el brócoli y la guindilla con un poquito de aceite y sal en un wok o sartén honda.
Rehogar un par de minutos.
Añadir un chorrito de agua tapar el wok y cocer unos 5 minutos. A mí me gustan las verduras no demasiado cocidas, si lo queréis más blando podéis prolongar la cocción otros 5 minutos.
Si queda agua, destapar y subir el fuego hasta que se evapore.
Retirar el brócoli y reservar.
Poner el resto del aceite con el ajo en el wok y calentar a fuego muy suave. No es obligatorio retirar la verdura, podéis poner el ajo directamente después del brócoli pero no se dora y el sabor será algo diferente.
Cuando el ajo empiece a dorarse añadir sal (no hemos salado el arroz al cocer así que aquí es donde vamos a sazonarlo, al ponerla en el aceite se repartirá con mayor facilidad), incorporar el arroz y el brócoli y remover para que se mezcle todo bien.
Seguir cocinando a fuego medio removiendo de vez en cuando hasta que el arroz quede suelto, un minuto o dos deberían bastar. Probad el punto de sal, si está soso aun podéis añadir.
Cortar la cebolleta, la parte verde también y añadirla al arroz.
Mezclar bien y cocinar un minuto más.
*En la mayoría de recetas de arroz blanco “a la japonesa” que he leído la proporción de arroz y agua es más bien de 1 / 1,2 pero cada vez que lo intento así se me pasa. Sera que el arroz de Calasparra es más poroso que el japonés?
Para servir:
Yo lo sirvo como plato único, con una ensalada, pero puede ser un primer plato o un acompañamiento revisando las cantidades.
Podéis espolvorear Frutos secos picados por encima, alga nori en trocitos pequeños o furikake de kombu.
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